El boleto de cine incluía dos películas: Shrek y Harry Potter y la piedra filosofal. El Chueck como le dicen en mi casa, se volvió esa película que puedo poner de fondo mientras horneamos y decoramos y siempre es entretenida. En cambio, Harry Potter, es el tipo de película que hace que mi mamá cambie el canal o de plano apague la tele. Yo en cambio salí del cine iluminada, esperando cumplir once años y que me llegara mi carta de Hogwarts.
Una matiné que terminó en obsesión
Una matiné que terminó en obsesión
Una matiné que terminó en obsesión
El boleto de cine incluía dos películas: Shrek y Harry Potter y la piedra filosofal. El Chueck como le dicen en mi casa, se volvió esa película que puedo poner de fondo mientras horneamos y decoramos y siempre es entretenida. En cambio, Harry Potter, es el tipo de película que hace que mi mamá cambie el canal o de plano apague la tele. Yo en cambio salí del cine iluminada, esperando cumplir once años y que me llegara mi carta de Hogwarts.